
SATURDAY NIGHT FEVER
Un artículo aparecido en el New York Magazine con el título de “Ritos tribales del nuevo sábado noche”, escrito por Nik Cohn en 1975, que luego confesó que había inventado su contenido en gran parte, fue lo que inspiró a Norman Wexler para escribir el guión que serviría de base a la película, que lanzó a la fama mundial a John Travolta enfundado en su traje blanco en la discoteca, con el brazo en alto, mientras sonaba la música de los Bee Gees, en una imagen que ha sido parodiada hasta la saciedad.
La película fue un boom de taquilla en 1977 y los Bee Gees se hincharon de vender discos, componiendo la banda sonora más vendida de la historia hasta aquel momento. El argumento nos presenta a Tony Manero, joven sin educación, que malvive en Brooklyn, trabaja en un almacén y tiene unos amigos en el barrio con expectativas de futuro tan nulas, como las suyas, para el que lo único que da sentido a su vida llega los sábados por la noche, cuando se prepara con exquisito esmero, para exhibirse en la discoteca, admirado por tod@s, donde se siente el rey.
Tony tiene una especie de novia, a la vez que pareja de baile llamada Anette a la que deja por Stephanie Mangano, que baila mejor y tiene una clase y una educación que le ha permitido trabajar y vivir en Manhattan. Tony y Stephanie se presentan a un concurso de baile que ganan pero Tony piensa que el jurado los ha elegido a ellos, para no dar el premio a unos hispanos que han bailado mejor y les regala el premio a la pareja de Puerto Rico.
Tony está enfadado y trata de desahogarse haciendo el amor con Stephanie, pero ella lo rechaza, algo que Tony no puede entender y forcejean hasta que ella consigue huir. Tony pasa toda la noche viajando en el metro pensando en la vida que lleva y a la mañana siguiente acude al apartamento de Stephanie para decirle que quiere salir de su barrio y marcharse a vivir a Manhattan, donde le gustaría poder contar con ella como amiga.La película tenía un lenguaje demasiado ordinario y específico, lleno de tacos y palabras malsonantes que eran las que utiliza el grupo de gente que protagoniza la historia, que nunca se habían escuchado en el cine y cuando la película se emitió por televisión se suavizaron mucho, así como el tema de las relaciones sexuales, embarazos no deseados, consumo de drogas, racismo, etc., que fueron todavía más pulidos a la hora de llevar el musical a escena. En la película también se mostraba a Travolta en ropa interior, recreándose en su cuerpo semi desnudo, algo habitual en el cine cuando se trataba de una mujer, pero nunca hasta entonces con un hombre, lo cual también fue criticado y le costó a John Badham, director de la película, su puesto ya que fue despedido al día siguiente del estreno en cines.
La película tuvo una nominación al Oscar, ¿en que categoria?…. lo primero que se nos ocurre es pensar en el apartado musical y vemos que aquel fue el año en que “La guerra de las galaxias” (Star Wars) le dió a John Williams el Oscar a la mejor banda sonora original y por “Dulce Viena” (A little night music) le dió a Jonathan Tunnick el Oscar a la mejor música adaptada del musical de Stephen Sondheim, mientras que la canción “You light up my life” ganó el Oscar a la mejor canción original para la película del mismo título, compuesta por Joe Brooks. ¿Entonces, si la única nominación al Oscar de esta película no fué en el apartado musical?… pues aunque no lo creais fue para John Travolta como mejor actor principal, que ganó Richard Dreyfuss por su interpretación en “La chica del adiós” (The goodbye girl).La película tuvo una continuación en “Stayin’ alive”, también con John Travolta, estrenada en 1983 y dirigida por Sylvester Stallone, tratando de continuar explotando la historia y música de los Bee Gees, que tuvo un éxito enorme de público que aún querían ver a Travolta tras “Grease” (1978) y Stallone aportó su granito de arena haciendo pasar horas a Travolta en el gimnasio, para que ganase músculo, algo que el intérprete de “Rocky” sabía muy bien cómo hacer y lo embadurnó en aceite para hacerlo brillar en ropa interior, explotando más si cabía la imagen de Travolta, que increíblemente se convirtió en una de las películas más taquilleras del año, aunque las críticas la machacaron, definiéndola como “la peor secuela del mundo”.
Tuvieron que pasar más de veinte años desde el estreno original de la película en 1977, para que Robert Stigwood, productor de los Bee Gees, a la vez que de los musicales “Hair” o “Jesus Christ Superstar“, pensara que todavía podía seguir explotándose la historia de la película en 1988, haciendo de ella un musical. Para ello se reunió con Nan Knighton (habitual colaborador de Frank Wildhorn), Arlene Phillips (coreógrafa de Grease, Flashdance, etc.), y Paul Nicholas (actor y cantante), para escribir el libreto del musical.A la partitura original de la película se le añadieron tres nuevas canciones de los Bee Gees: “Jive Talkin’”, incluida en el CD de la banda sonora original, pero que no aparecía en la película, “Tragedy” un éxito posterior de los Bee Gees e “Inmortality”, grabada a dúo por los Bee Gees con Celine Dion y se buscó la forma de incorporarlas a la trama. Y hay que tener en cuenta que las canciones de la película sonaban de fondo en discotecas y no hacían avanzar la acción de la película, con lo cual poner en boca de los intérpretes las canciones, como parte de sus sentimientos o diálogos, dentro de un argumento que no se puede cambiar o inventar…… .
La versión del musical se estrenó en el London Palladium de Londres en Mayo de 1998, con Adam García como Tony Manero, consiguiendo tres nominaciones a los Olivier Awards: Garcia (actor), Phillips (coreografia) y Stigwood (productor mejor musical), que si bien no consiguió ninguno de ellos, gozó del éxito popular ya que estuvo en cartel hasta Marzo del 2000, siendo posteriormente exportada a Broadway (2000), Holanda (2001), Argentina (2001) con Dario Petruzio (Tony), Silvia Luchetti (Stephanie) y Elena Roger (Anette) y Méjico (2003) y en el 2004 se repuso en Londres en el Apollo Victoria Theatre y luego salió de gira por el país hasta el año 2006. En Seoul se estrenó el 2007 emprendiendo una gira por Asia.En Febrero de 2009 se estrenó en el Lope de Vega de Madrid, continuando con una gira por España que terminó en Mayo de 2010, teniendo en el reparto de Madrid a Juan Pablo Di Pace (Toni), Beatriz Ros (Stephanie), Isabel Malavia (Anette), Zenon Recalde (Monty) y Guillermo Sabariegos (Bobby C). La adaptación de las canciones fue de Daniel Anglés y Juan Vazquez en un desafortunado trabajo con rimas imposibles, donde en medio de una canción en castellano dejaban el título o algún verso en inglés, aunque sinceramente pienso que la gente que va a ver este musical (y yo lo vi en Londres, cuando se estrenó), en lo último en que se fija es en el sentido de las canciones y en lo justificado o innecesario de un número de baile para contar algo que sirviese a la historia.
En el 2011 también se repuso en Holanda, continuando luego de gira por el país e incluso y se representa en uno de los cruceros por el Caribe, lo que puede dar una idea del público a quien va destinado este musical, sin que suene esto como algo peyorativo, sino que va dirigido a un público mayoritario que acude a escuchar las canciones en directo y bailar si le dejan, poniendo poca o ninguna atención en lo integrados que están los números en la historia y si la ayudan a avanzar o son perfectamente suprimibles, sin alterar para nada la trama.
MÚSICA Y LETRAS: Bee Gees
Existe el CD del musical original de Londres de 1998 con Adam Garcia y el de la película con los Bee Gees. No existe CD del reparto de Madrid, aunque se grabó un single promocional con cinco temas que no salió a la venta.
También se puede conseguir el DVD de las dos películas y el Blu Ray de la primera, claro en el que ninguna canción está subtitulada, aunque por una vez, reconozco que no hace ninguna falta que lo estuvieran para entender la película.