LA PUTA ENAMORADA
José María Gómez Cardeña, es un dramaturgo, actor, director, productor y profesor de teatro nacido en Córdoba y conocido entre la profesión como Chema Cardeña, creador con Juan Carlos Garés en 1995 de Arden Producciones y establecido en la Sala Russafa de Valencia, donde suele estrenar todas las obras que escribe, de las que ya nos hemos hecho eco en esta página de algunos títulos como “Revolución” o “De Hiroshima y Nagasaki“.
“La puta enamorada” fue escrita hace quince años y en ella nos presenta al pintor Diego Velázquez, al que el Rey ha encargado que le pinte un cuadro de su amante, la Calderona, orden que el pintor y la modelo no aceptan de buen gusto porque es una imposición del que paga y ambos se echan en cara ser iguales, una prostituta del poder que hace lo que manda aquel que paga.
Aún así, el pintor que es un artista, un creador, encuentra la forma de dar salida a su creatividad y se rebela frente a lo convencional, para conseguir una de sus obras más personales, partiendo de un encargo crea una obra maestra de la pintura, la famosa “Venus del espejo”. El autor con tan sólo tres personajes: la Calderona, Lucio su criado y Diego de Velázquez, situa la historia en un decorado único, el estudio del pintor.
La producción de Salvador Collado con el Teatro Calderón de Valladolid, dirigida por Jesús Castejón y con Juanjo Llorens diseñando las luces para esta historia que nos habla del pintor de la luz, llega a Valencia tras una gira por España, contando con Eva Marciel (Calderona), Javier Collado (Lucio) y Federico Aguado (Diego) que tienen ocasión de lucirse con sus personajes llenos de matices y cambios de estado de ánimo y de humor, que les permite navegar por las diferentes realidades de cada personaje. La obra cobra especial relevancia en nuestros días, con la nefasta relación de un poder que da la espalda a la cultura, con el desproporcionado aumento del IVA en las entradas, pero que trata de servirse de ella dando premios a celebridades que han rechazado en varias ocasiones, como muestra palpable del desprecio al que somete el gobierno a la cultura, pero que gusta de hacerse la foto con el prestigioso premiado para darse notoriedad.
Hay una frase en la obra que el autor pone en boca de Lucio, actor o cómico como se les llamaba entonces, que me llamó poderosamente la atención, en la que le dice al pintor: “Ya no hay cómicos en España. Sus reyes y gobernantes nos han quitado el trabajo. Son mucho mejores. En el Alcázar y en los palacios se dan las buenas representaciones. ¿No os parece, señor?”.
En el programa de mano el autor escribe: “El arte al servicio del poder. Los artistas han tenido que convivir con el poder, con sus caprichos, sus desprecios, sus prioridades y con su dinero. Han sido utilizados, aplaudidos, encumbrados y desprestigiados por aquellos que poseen el vehículo para que éstos puedan desarrollar su creación. Esto es, ha sido y será una realidad, incómoda pero tan cierta como el hecho mismo de crear”.
TEXTO: Chema Cárdeñas
DIRECCIÓN: Jesús Castejón
Os dejo con un video promocional de la obra cuando pasó por el Festival de Almagro