TERCERA SETMANA 2016 – Balance
Ha pasado como un tren de larga velocidad, pero en tal sólo diez días el Festival de Artes Escénicas TERCERA SETMANA de Valencia, ha sido una bocanada de aire fresco que la ciudad necesitaba y que ha demostrado que hay público ávido de buenas propuestas y con interés por la cultura, ese bien que nos divierte, nos zarandea, nos incomoda o nos hace pensar y es adictivo, lo cual tiene su riesgo unas veces para las compañías y empresas que lo programan y otras para el “aparato del Gobierno” que debe saber aceptar las críticas desde un escenario, del mismo modo que los actores aceptan las que se les hacen desde los medios de prensa.
Tras la finalización del Festival tuvo lugar una rueda de prensa en el Restaurante MOn de Valencia, en la que Salva Bolta como director artístico del mismo y María Angeles Fayos como Presidenta de AVETID (Asociación Valenciana de Empresarios Teatrales), dieron cuenta del Balance final de esta apuesta cultural en el que agradecieron a los patrocinadores, las instituciones, la profesión y el equipo humano que lo ha hecho posible que esta idea que arrancó como un sueño hace un par de años, por fin se haya hecho realidad.
Maria Angeles Fayos y Salva Bolta en la rueda de prensa
El objetivo que se habían planteado les hace reconocer con humildad y orgullo que han conseguido llevar las más variadas ofertas desde las salas en el centro de la ciudad a locales de los barrios, acercando de este modo las artes escénicas a todo tipo de públicos, del mismo modo que se dió cabida en la programación a compañías valencianas, españolas y extranjeras, algo en lo que se pretende profundizar en posteriores ediciones, atrayendo montajes de otros países, del mismo modo a cambio de exportar lo que hacemos en nuestra comunidad a públicos de fuera de la península.
Se han podido ver un total de 27 espectáculos entre salas comerciales, plazas y mercados en el que estimaron que la oferta fue vista por unas 7.000 personas. El coste total estimado del festival estuvo presupuestado en 290.00o euros que han salido de una subvención del 68% de las instituciones, un 4% de la empresa privada, un 20% de la venta de entradas. El estudio estaba hecho confiando con una ocupación del 85% de las salas, si bien la media ha sido del 65%, por lo que AVETID ha hecho frente a los 20.000 euros que faltaba por cubrir.
Parte del equipo humano que estuvo detrás del Festival Tercera Setmana
A pesar de todo desde la organización consideran un logro haber sido capaces de arrancar un proyecto de estas dimensiones, movilizando en tan corto espacio de tiempo un público que colgó el “localidades agotadas” en doce de las funciones que se dieron y doy fe por experiencia propia de haber podido disfrutar del Teatro Principal al completo, en pie, aplaudiendo al final de “HAMLET”, tras más de dos horas y media ininterrumpidas de función.
Hay que destacar también que si es fácil llenar teatros regalando entradas, en este Festival TODO el mundo compró su entrada, hasta los artistas que querían invitar a sus familiares, adquirieron por su cuenta las entradas y por eso se puede asegurar que se vendieron 4.657 entradas. Lo que el espectador medio ve como un divertimento tiene detrás todo un entramado que da empleo y atrae a un público que sale de casa y luego va a cenar a un restaurante, o se desplazan desde otras ciudades y pernoctan en un Hotel y hay que ser conscientes de que el turismo cultural es una baza que está poco explotada en nuestra ciudad.
Los responsables terminaron diciendo que acertar y cometer errores es la única forma de crecer y tras la experiencia de este año y ya con el pensamiento en la próxima edición, seguirán negociando con las compañías y las instituciones para que sean conscientes de que este tipo de festivales son una inversión para la ciudad y Valencia debe recuperar su lugar en el mapa internacional de la cultura, que la abra a otras formas de hacer fuera de nuestro país al público valenciano y que la ayude a exportar el talento de nuestras compañías, que también tienen mucho que ofrecer.
Creo que el camino emprendido es el acertado. Gracias porque como espectador ha sido todo un lujo.
