
LA MISIÓN (The mission)
Esta película estrenada en 1986 se convirtió en un éxito inmediato de taquilla. El mayor reclamo lo constituían sus protagonistas Robert De Niro y Jeremy Irons. Dos personas con formas muy distintas de afrontar la vida y aunque en un determinado momento ambos compartan la misma disciplina, al final optarán por diferentes caminos para sentirse coherentes con su forma de ser y actuar. En el reparto vemos a unos jovencísimos Liam Neeson y Adan Quinn.
El guión es de Robert Bolt, oscarizado por sus trabajos en “Un hombre para la eternidad” (A man for all seasons) o “Doctor Zhivago”. En esta ocasión saca a la luz las luchas entre los gobiernos de España y Portugal con los jesuitas que ayudan a los indígenas a trabajar sus tierras y vivir de su trabajo. La Iglesia tiene potestad sobre los jesuitas que tratan de convencer al enviado del Papa, para que no permita que se comercie con los indios como esclavos y se les siga dando autonomía total.

El comercio de esclavos lo hemos visto en películas como “Lo que el viento se llevó” (Gone with the wind) o “La cabaña del tío Tom” (Uncle’s Tom cabin) por citar un par de ellas, pero no sólo ocurrió con la raza negra y vemos casos como este, basado en hecho reales, que nos parecen horribles pero lejanos en el tiempo, pero no olvidemos que la esclavitud sigue vigente de diferentes maneras, al igual que el hecho de que países poderosos ataque a otros por sus recursos o situación estratégica.
La película está rodada en los escenarios naturales de Colombia, Brasil y en las cataratas de Iguazú que comparten Argentina y Paraguay. La fotografía es de Chris Menges que repetía con el director Roland Joffé tras “Los gritos del silencio” (The killing fields), con la que había ganado el Oscar a la mejor fotografía y la música, excelsa partitura, es del maestro Ennio Morricone, que estando nominado al Oscar le fue arrebatado por Herbie Hancock con su composición para “Alrededor de medianoche” (‘Round midnight).