OJOS QUE NO VEN
Natalia Mateo escribió y dirigió el corto “OJOS QUE NO VEN”, que fue finalista a los Premios Goya de 2012. Desde entonces aquel trabajo le ha reportado más de una veintena de premios. Con el tiempo decidió adaptar el guion para transformarlo en pieza teatral de 90 minutos, que dirigida por Carles Alfaro se estrenó en Diciembre de 2021 en los Teatros del Canal de Madrid. Tras haber girado por diferentes ciudades llega al Teatro Principal de Valencia, donde se verá del 13 al 15 de Enero de 2023.
El subtítulo de la obra dice “Una Nochebuena, más noche que buena” y nos presenta una familia cualquiera que se reúnen para celebrar la Navidad. Es la ocasión en que se juntan todos cada año. Como en cualquier familia, cada uno de los miembros sabe cosas del resto que es mejor no airear y existe como un pacto tácito de no agresión, para que la noche fluya en una aparente armonía y todo termine bien.
En esta familia la matriarca, estupenda Mamen García, está ciega y se ha tenido que ir a vivir con un su hija Carmen (Mariola Fuentes), que también se encarga de Cole Porter, el perro de su madre y está agobiada por las constantes quejas de su autoritaria madre, que le reprocha que hayan llevado a su marido a una residencia porque no puede valerse por sí mismo.
Carmen lleva cocinando todo el día para tener una cena de Nochebuena perfecta, a la que acudirán además de su madre, su marido Manolo (Jorge Roelas) y su hijo Raúl (Alvaro Fontalba), su hermana casada Raquel (Cecilia Solaguren), su cuñado Luis (Javi Coll) y su otra hermana Esther (María Maroto). Pero antes de la cena una inesperada noticia puede hacer que la noche sea la más triste del año y Carmen decide que no se le diga a su madre, para tener una noche alegre y feliz y advierte a unos y otros los temas que no se deben sacar en la mesa. Pero la noche no ha hecho más que empezar.
Lo que todos callan por no disgustar a la abuela y las situaciones que se producen manteniendo una armonía postiza y tensa, a la que cada imprevisto se soluciona con una mentira más absurda, para regocijo del público, además es potenciado por unas canciones en vivo que irónicamente hablan de amor y paz, hasta llegar a la catarsis final en la que todo queda al descubierto.
Una divertida a la vez que agria reflexión sobre la familia, que desarrollándose en una noche y en un mismo escenario, esta dividida en distintas escenas, separadas por fundidos en negro, que quizá ganarían si todo se produjese sin pausa, en plan comedia loca, sin dar reposo al espectador hasta la explosión final.
AUTOR: Natalia Mateo
DIRECCIÓN: Carles Alfaro
