Esta película ponía fin a la trilogía de Sergio Leone con “El hombre sin nombre”. Tras “Por un puñado de dólares” y “La muerte tenía un precio” vino “El bueno, el feo y el malo” que catapultaron a la fama a Clint Eastwood, Sergio Leone y Ennio Morricone.
El ya famoso director italiano había conquistado Hollywood con un género eminentemente americano al que dio su personalísimo estilo, contando historias con tomas de primerísimos planos y tomándose todo el tiempo del mundo para contarlas.
Cine con extras y escenarios naturales rodados en España, cuando todavía no existía la digitalización ni las pantallas verdes… ¡y se nota en el resultado final!. Impresionante el final con el cementerio de Sad Hill y Edda dell’Orso a pleno pulmón entregándose al “éxtasis del oro” del “Gennio Morricone”. Ya no se hacen películas así.