Ushuaia es un municipio argentino conocido popularmente como “la ciudad del fin del mundo”, llamada así por estar situada al final del cono Sur americano. Es el último reducto habitado del planeta y hasta allí acuden los protagonistas de esta obra, huyendo de un pasado y unos recuerdos que no les abandonan por más lejos que traten de esconderse.
La historia nos mantiene pendientes en todo momento, tratando de entender lo que nos van contando los personajes y que aunque parece confuso al principio, porque juega con saltos adelante y atrás en el tiempo y en diferentes lugares que van de Salónica cuando el holocausto nazi hasta muchos años después en la ciudad austral de Ushuaia, pero poco a poco las piezas van encajando en el rompecabezas diseñado por Alberto Conejero, que nos termina revelando la imagen bien definida de los personajes, sus verdades, sus sombras y sus motivaciones.
“Ushuaia” obtuvo el Premio Ricardo López de Aranda en 2013 y en ella el autor brilla con altura en un entramado de situaciones y frases que nos calan rápidamente, hasta el punto de que algunas quisiéramos llevarlas con nosotros al término de la función, pero la velocidad del texto y el cúmulo de ellas hace imposible retenerlas, si no queremos perdernos el drama que se muestra en escena.
Hay que destacar la buena interpretación de todo el reparto, en el que sobresale un José Coronado en estado de gracia, que revalida el momento que está viviendo actoralmente y lo cuidado de un texto potente y muy cuidado, que consiguió que el público contuviese hasta la respiración en medio de un silencio brutal, donde no sonó ni un móvil ni una simple tos en toda la función. Una delicia.
TEXTO: Alberto Conejero
DIRECCION: Julián Fuentes Reta
El texto está publicado por la editorial ADE (Asociación de Directores de Escena).
Para terminar un video promocional de la misma