Hay muchas películas basadas en la inmortal obra de Gastón Leroux, sobre el misterioso músico desfigurado que vive escondido en los sótanos de la ópera de París y está enamorado de una cantante que quiere que cante su música. Voy a centrarme en la versión del musical que escribió Andrew Lloyd Webber y se estrenó en Londres en 1986, dirigida por Harold Prince que sigue en cartel en Broadway y Londres donde en Octubre celebrará 35 años de su estreno. Como dice un amigo mío: “Algo tendrá el agua, cuando la bendicen”…..
Los protagonistas que crearon los personajes en el musical en teatro fueron Michael Crawford y Sarah Brightman, la esposa de Lloyd Webber. Tras muchas promesas de que iba a llevarse al cine con John Travolta, Antonio Banderas y otros, finalmente llegó en 2004, en una versión dirigida por Joel Schumacher, que quiso que los protagonistas “fueran sexis”. Gerard Butler, Emmy Rossum y Patrick Wilson, eran jóvenes y sexis, pero sólo Patrick Wilson tenía experiencia como cantante en un musical, porque Butler había tenido un grupo de rock, pero los matices que demanda el personaje del Fantasma requieren de una voz que diga lo que el rostro semi oculto por la máscara, no puede expresar y como dice otro amigo mío “esa partitura se merecía una mejor película”.
El reparto es maraviloso con un Fantasma (Ramin Karimloo), una Christine (Sierra Boggess) y un Raúl (Hadley Fraser) que dicen la partitura interpretándola como la soñó el autor y es una auténtica delicia ver como maneja el suspense, el romanticismo y el terror en esta potente historia de amor.
El musical en concierto que os recomiendo está en alquiler en Apple TV, Amazon Prime y Google Play
La película de cine está en SkyShowtime