Eduardo Galán (Adaptador español de “El Fantasma de la Ópera” o “Defendiendo al cavernícola”) y Gabriel Olivares (Director de “Burundanga” o “Una boda feliz”), ya habían trabajado juntos en “La importancia de llamarse Ernesto” o “Historia de dos” y decidideron trabajar juntos en una pieza teatral ambientada en el mundo del periodismo, situado en esta España de la crisis y la corrupción, en la que la prensa destapa hoy sí y mañana también un escándalo tras otro.
Ana Ruíz, Patxi Freytez, Natalia Dicenta, Javier Martín son el director Gabriel Olivares
La historia nos presenta una redacción de un periódico de ficción “El Universal”, dirigido por Tatiana (Natalia Dicenta), experta periodista que lleva al frente del mismo más de veinte años, ayudada de Fuentes (Javier Martín), su brazo derecho, hasta que un día tras un ERE en el que despiden a 20 trabajadores, les llega con la “bendición” del consejo de administración Minerva (Ana Ruíz), una joven experta en periodismo digital, para tratar de rejuvenecer y dar un aire nuevo al periódico.
La imposición de “la nueva” no agrada a la directora ni a su brazo derecho, pero ella descubre un posible caso de asesinato, que puede tener que ver con la construcción de un Oceanográfico en Castilla La Mancha, porque los políticos quieren ¡llevar el mar a Castilla!, una misión tan lúcida como la de construir un aeropuerto sin aviones. Entonces, enmedio de este embrollo entra en acción Nacho (Patxi Freytez), antíguo periodista que trabajó con Tatiana y que hoy forma parte del Gobierno.
Llena de referentes a los cuentos, como esa manzana del bien y del mal, o ese zapatito de cristal que ofrece Tatiana a Minerva, símbolo de la tentación de la bruja a Blancanieves o a alcanzar el estatus de princesa en La Cenicienta, por no hablar del arranque de la obra con la entrega del premio de periodismo, a la recien llegada Minerva, que nos va a llevar a un enorme flashback que nos va a contar la historia desde el principio desde este cómplice guiño al comienzo de “Eva al desnudo”, la obra maestra de Joseph L. Mankiewicz.
Dos actrices y dos actores entregados a fondo y una muy buena dirección del espacio y movimiento escénico, nos atrapan durante los noventa y cinco minutos de la función, con algún guiño como el tema de Dolly Parton “Nine to five”, reflejo del ritmo frenético de lo que debe ser la redacción de un periódico, o en un momento puntual, que en un pub se escucha de fondo “For once in my life” interpretado por la propia Natalia Dicenta, y uno de los personajes comenta: “¿Quién es la que canta?: Es buena”.
TEXTO: Eduardo Galán y Gabriel Olivares
DIRECCIÓN: Gabriel Olivares