Escapada a New York Octubre 2010
Buenas, ya casi estamos a punto….. ¿Acaso pensábais que os habíais librado del goteo de posts y demás?…. pues va a ser que NO.
Algún amiguete me ha dicho que debo espaciar mis crónicas para dar tiempo a leerlas a todo el personal que siga la página. Y lo confieso, al principio me entró una cierta prisa por tener al día la cartelera de las dos capitales del musical mundial y ahora prácticamente ya están, así es que espero no agobiar mucho con un chorreo de cosas.
Empezando por el principio: en New York poco que añadir a lo que ya avancé. Pude ver:
“LA CAGE AUX FOLLES” con Kelsey Grammer (inmortal Frasier), lamentablemente Douglas Hodge estaba de vacaciones en Londres. La puesta en escena es más desahogada y se pueden permitir más espacio para moverse en unos decorados algo más grandes. En cuanto al reparto, los secundarios me llamaron la atención al ver unas “cagelles” dentro y fuera de la jaula, con sus coreografías y contorsiones más propias de un número circense que de un musical, pero muy bien ejecutadas. Robin De Jesus fue muy aplaudido y lo cierto es que está muy bien en el papel del criado de la pareja protagonista. En cuanto Chris Hoch es el understudy, cover o sustituto por emplear un término español, de los dos personajes protagonistas y en este caso interpretaba a Albin al no estar Hodge, pero que me mereció todo el respeto al saber que puede sustituir también a Georges, dos papeles de una misma obra con dos registros totalmente diferentes. Aún así, a pesar de estar muy bien tanto Kelsey Grammer como Chris Hoch al haber tenido la suerte de verlo por Philip Quast y Douglas Hodge, la comparación hacía que ganara el reparto inglés al americano por goleada.
“PROMISES, PROMISES” musical de mi amado Burt Bacharach con un reparto estupendo en el que sobresale Sean Hayes por mérito propio y Katie Finneran nos demuestra que el Tony lo tuvo merecidísimo. Kristin Chenoweth está correcta en un papel que no le permite lucirse como a sus compañeros y quizá por ello le han puesto dos canciones extra, rescatadas del cancionero de Bacharach que aunque nunca estuvieron en este musical, y de hecho se nota que son un pegote, pero Chenoweth sabe aprovechar su baza de interpretarlas. Aún así la obra tiene mucho texto y quizá el esfuerzo de entender el máximo posible me dejó algo agotado.
“THE ADDAMS FAMILY” Tras todos los comentarios negativos recibidos antes de verla, no me pareció tan aburrida y de hecho el CD lo había escuchado con anterioridad y me gustaba ya que tenía temas bastante pegadizos, que en escena resultan bien y siempre es un lujo tener enfrente a -para mi- tres monstruos del musical como son Nathan Lane, Bebe Neuwirth y Carolee Carmelo. La gente reía a carcajadas prácticamente cada frase de la obra, hecho que me dió cierta rabia por no pillar los chistes y lo cierto es que tras el atracón de texto de la obra anterior, en esta me relajé y me dejé llevar por lo que pasaba en escena ya que me pilló casi derrotado y creo que me llegó todo el jetlag de golpe.
“A LITTLE NIGHT MUSIC” Otra producción de la Menier como La cage aux folles que ha asaltado Broadway y se ha hecho con el público que aplaude a rabiar las excelentes interpretaciones de todos. Bernadette Petters, Elaine Stritch y Alexander Hanson lideran este reparto, en el que repito, todos están como la pasta, “al dente”. Al terminar la función Elaine Strich se dirigió al público para decir que había sido una función especial ya que despedían a dos miembros de la compañía una diseñadora de vestuario creo recordar y luego Bernadette Peters anunció que la otra despedida era para Alexander Hanson, su pareja protagonista, que había sido el alma de la compañía y que partía a Londres para interpretar con su esposa Samantha Bond la obra “Un marido ideal”. En ese momento me di cuenta de que todos los actores y actrices del escenario estaban llorando. Sin duda fue la obra que más me gustó de New York. De allí al galope, porque solo tenía 15 minutos para llegar al teatro de
“THE LION KING”. Era mi tercer rey león. El primero en Broadway me gustó mucho, el segundo en Londres no me gustó y echaba la culpa de ello al calor y a toda la chiquillería que había en el teatro. En esta ocasión, tras ver en cuarta fila “A little night music”, subirme al segundo piso para ver los muñequitos del rey león hizo que a los diez minutos me preguntase qué estaba haciendo allí y por respeto aguanté hasta el intermedio, donde sin dar más explicaciones abandoné la sala. No quiero decir que el musical no esté bien, sino que después de una obra densa, que te llena, necesitas un tiempo para reposar todo lo que has visto y The Lion King en “el gallinero” era lo más desaconsejable para ese momento.
“NEXT TO NORMAL” Tenía ganas de repetirla tras la experiencia del año pasado y la verdad es que valió la pena revalidarla. La obra sigue siendo la misma, pero ya te suena todo un poco más y ver cómo una actriz sabe darle su toque personal a un papel creado por otra, siempre me parece increíble porque el texto es el mismo, pero hay tantos matices que me asombra comprobar como te la pueden hacer gozar como si fuese nueva. Parecía que la obra era impensable sin Alice Ripley, pero ahora Marie Mazzie con su marido en la vida real, Jason Danieley me encantaron tanto interpretando como cantando. A la salida estuvieron amabilísimos y nada divos, atendiendo cada petición de fotos y firmas. Excelente colofón para este viaje.
Por lo demás, la ciudad que “nunca duerme” como dice la canción, sigue igual. Las colas en Tickets con sus animadores vivientes no dejan de ser otro espectáculo. Desde las chicas vestidas como en Chicago o el chico vestido como en La cage aux folles que te dan propaganda del musical que anuncian, y aparte hay gente voluntaria alrededor de la cola que te aclara cualquier duda sobre horarios, forma de pago o de qué va determinada obra. En fin, un servicio en vivo y en directo.
Por otro lado, en el tema compras, siempre se me plantea la duda de cómo pueden estar las cosas a aquellos precios: Las entradas en taquilla valen lo mismo que en España, pero puedes sacar en el día prácticamente para cualquier espectáculo con el 50% de descuento.
No vamos a hablar de los precios o surtido de DVDs o Blu-rays en comparación con nuestro país, porque aún no salgo de mi asombro cada vez que acude a mi retina la caja con los 7 blu-rays de las 6 peliculas de Harry Potter en la misma edición que en España por 28 libras.
¿Y qué decir de la política de algunas marcas que te cobran el mismo importe en todos los países, variando sólo la moneda. O sea que un ipad en USA vale 800 dólares, en Europa 800 euros y en Inglaterra 800 libras. O sea, como para ir a comprartelo a the United Kingdom.
Por otro lado, las marquesinas de Broadway ya se están preparando para la primavera caliente que se avecina: Mujeres al borde (Yazbeck), Spiderman (Bono), Scottsboro boys (Kander+Ebb), Catch me if you can (Shaiman+Whittman), Anything goes (Porter), Como triunfar sin dar golpe (Loesser), Sister act (Menken), Priscilla, Wonderland (Wildhorn) y quizá alguna sorpesa más…..