
IRMA LA DULCE (Irma, la douce)
Billy Wilder, posiblemente sea el director cuyos guiones han sido llevados al terreno del musical, más veces que a ningún otro, baste recordar “Ninotchka” (Medias de seda), “Bola de fuego” (Nace una canción), “El crepúsculo de los dioses” (Sunset Boulevard), “Con faldas y a lo loco” (Sugar) y “El apartamento” (Promises, promises).
Debió quedar bastante escarmentado de su “El vals del emperador” un vehículo con canciones al servicio de Bing Crosby, del que Wilder siempre reniega y por eso no extraña que cuando tuvo la oportunidad de llevar al cine un musical “Irma, la douce”, se quedó con la historia, eliminando todas las canciones.André Previn consiguió el Oscar por la banda sonora de la película en la que utilizó alguna melodía del musical francés, como el número “Dis-donc”, que suena mientras Shirley McLaine baila sobre una mesa y es coreado por el resto de parroquianos del café. Por eso en algunas fichas de la película aparece que la música es de André Previn y Marguerite Monnot, que es la compositora del musical.
La obra original presentaba a un estudiante de derecho que conoce a una prostituta y se enamora de ella. Al no poder soportar verla con otros se hace pasar por un hombre rico y paga sus servicios para ser el único que está con ella. El guion que adaptaron Billy Wilder y I.A. L. Diamond introdujo algunos cambios como que el estudiante lo convirtieron en un guardia que patrulla en el barrio donde vive y trabaja Irma.La película iba a reunir a Marilyn Monroe con Jack Lemmon, reuniendo así de nuevo a Billy Wilder con los actores de “Con faldas y a lo loco”, pero la muerte de la estrella hizo que tuviesen que buscar otra actriz a la que emparejar con Lemmon. Fue Shirley McLaine que también había trabajado con el actor y el director en “El apartamento” y que hizo toda una creación del personaje, que le valió una nominación al Oscar a la mejor actriz. Solo por ver a Lemmon y MacLaine merece la pena ver la película, pero es que detrás de la cámara y el guion está nada menos que Dios, Billy Wilder y eso ya son palabras mayores.
La película está en FILMIN