EL VENTRÍLOCUO
“El ventrílocuo” es un espectáculo de Jaime Figueroa difícil de definir. Es mucho más que un monólogo. No es lo que los americanos llaman “one man show”, puesto que en escena está acompañado por Gonzalo García Baz al piano y Violeta Veinte al violín. Figueroa además de interpretar a varios personajes, canta, baila y hasta manipula muñecos. En fin, lo de “hay que verlo para creerlo”, en este caso tampoco vale, porque llegas a dudar de que lo que estás viendo a escasos centímetros de tu nariz, es cierto.
Descubrí a Jaime Figueroa en “El aroma de Roma”. Estaba muy divertido como actor y hasta cantaba muy bien sus temas en el musical de Woody Aragón y de los Hermanos Lancha. La semana pasada pude ver al actor en “Avenue Q” y me sorprendió su mimetización con los muñecos. Sus otras habilidades ya las conocía. En este espectáculo me ganó su naturalidad, su conexión con el público, su capacidad de improvisación y por supuesto, su perfección como ventrílocuo.
En la función entre otras cosas, Figueroa nos cuenta los orígenes de la ventriloquia. Lejos de lo que hemos visto con José Luis Moreno o Mari Carmen, que actuaban con muñecos y … les veíamos mover la boca, Figueroa nos hace ver sus divertidas discusiones con unas pulgas, con Mefistófeles, con gente del pasado, etc …. nos hace “ver” seres que no están y … su boca no se mueve. Algo completamente impresionante y todo ello con mucho sentido del humor.
Su manejo de la voz es de un control alucinante. Modula diferente para cada personaje de los muchos en que se desdobla. Se multiplica, se divide y nos arranca carcajadas con sus ocurrencias. Reconoce que empezó como mago, pero que poco a poco ha ido practicando y especializándose como ventrilocuo. El guion es suyo en colaboración con Rafael Boeta, que también le ha escrito las letras de las canciones del show con musica de Gonzalo García Baz. Las coreografías son de Sonia Dorado.
Son noventa minutos de una entrega brutal. Figueroa está paseándose por el patio de butacas, saludando al público desde que entra en la sala, antes del comienzo del show, presentándose y tranquilizándolos asegurando que él no saca a nadie a escena. Al final de la actuación, baja del escenario, para ir a la puerta y despedir a cada espectador. Todo un caballero.
En principio comentó que solo le quedan tres funciones en el Teatro Alfil de Madrid y serán los días 27 de Junio, 11 y 25 de Julio de 2024. Altamente recomendable. Yo no había visto nada igual.
TEXTO: Jaime Figueroa y Rafael Boeta
CANCIONES: Gonzalo García Baz y Rafael Boeta
Teminamos con algunos videos promocionales del espectáculo