
MOULIN ROUGE
Baz Luhrmann sorprendió a todo el mundo en el año 2001 cuando estrenó “Moulin Rouge”, una atípica película que desataba las más encontradas reacciones, o bien la amabas y la veías más de una vez o la odiabas a muerte. Corrieron ríos de tinta alabando o renegando de la película, si bien lo cierto es que llevó a la gente a verla en manadas y fue un éxito de taquilla indiscutible.
Cuando el cine musical estaba considerado veneno para las taquillas, Lurhmann se atrevió a montar esta película, en la que el argumento es una pieza de encaje, en la que construye algunos diálogos tomando versos y frases de canciones pop superconocidas, que enlazan perfectamente y ayudan a avanzar la acción de la historia, gracias a la excelente labor del director musical Marius DeVries y la música original escrita por Craig Armstrong.La historia es un refrito de mil historias en la que Luhrmann y Craig Pierce tomando como referente la novela romantica de Alejandro Dumas “La dama de las camelias”, nos presentan el amor imposible entre una prostituta de lujo (Margarita Gautier) y un joven (Armando Duval), que termina porque ella muere de tuberculosis, como en la película que estamos comentando, aunque ya en la primera escena el protagonista (Ewan McGregor), nos advierte de que ella (Nicole Kidman) está muerta y nos cuenta la historia a través de un flash-back.
El tercero en discordia, un duque (Richard Roxburgh) enamorado de la principal vedette del Moulin Rouge (Kidman), que consiente en financiar un espectáculo, siempre y cuando pueda disfrutar de ella en exclusiva, pero nuestra protagonista le da largas porque está enamorada del escritor sin blanca (McGregor), que es el autor del espectáculo que financia el duque en el Paris de principio del siglo pasado.Luhrmann juega varias bazas y trata de homenajear muchos géneros, así las escenas en que el duque descubre a la pareja protagonista juntos, son desmontadas rápidamente por el dueño del Moulin Rouge y los amigos del escritor, pero jugando a la comedia del absurdo y tratando al duque de poco menos que idiota ya que, prácticamente está presente en cada momento y no se da cuenta de la historia que hay entre ellos. En algunos momentos recuerda el humor surreal de los Hermanos Marx, con toques de las coreografías de Busby Berkeley.
La tarea más difícil para Lurhmann es combinar estos momentos surreales y absurdos, como el de tema de Madonna “Like a virgin”, con otros de comedia como la escena del pupurri en la estatua del elefante, o altamente románticos como los de las canciones “Your song”, “One day I’ll fly away” o “Come what may” y los profundamente dramáticos como la escena violenta entre el duque y Satine, combinada con el baile del tango adaptado a la canción de Sting “Roxanne”, o el del tema de Queen “The show must go on”.La sorpresa con la que contó Luhrman fue con la pareja protagonista que sorprendió a todos, cantando sus partes de diálogos y en su mejor momento, con una Nicole Kidman que nunca estuvo tan guapa, un Ewan McGregor de galán romántico que estuvo perfecto, secundados por otros artistas como John Leguizamo como Toulouse-Lautrec y las australianas Caroline O’Connor y Kylie Minogue en papeles secundarios.
El director dio rienda suelta a su desbordante imaginación, creando unos decorados fantásticos e irreales sobre los tejados de Paris, para que los protagonistas bailasen sobre ellos, o de la escena final digno homenaje a Bollywood, en el que al ambientar el espectáculo en la India, se puede permitir un derroche de colores, que de otra forma sería imposible. Otras escenas multitudinarias como las iniciales en el Moulin Rouge, con el baile del can-can o luego con todos los caballeros vestidos de smoking girando alrededor de la diosa del espectáculo, también nos llevan a recordar el número de “Top Hat” con Fred Astaire.Lo que más se le criticó a la película fue el montaje acelerado de planos cortos que no dejaba disfrutar de las escenas, que más tarde fue copiado por Rob Marshall en algunos momentos de “Chicago”. Fue nominada a ocho Premios Oscar incluidos el de Mejor Película y Mejor Actriz para Nicole Kidman, aunque sólo consiguió los de mejor vestuario y dirección artística, sin embargo en los Premios Golden Globe que fue nominada a 6 premios, se alzó con el de Mejor Película Musical, Mejor actriz en un musical (Nicole Kidman) y Mejor Banda sonora original (Craig Armstrong).
Los estudiosos del film destacaron la utilización de los nombres de los protagonistas, él Christian y ella Satine, creyendo ver en el protagonista inocente y de corazón abierto a Cristo-Christian y ella la prostituta que se entrega a los hombres por dinero a Satán-Satine, pero esa interpretación va más lejos de lo que la película cuenta, así que lo dejo al gusto de cada uno, porque para mi es irrelevante.
MÚSICA Y LETRA: Varios
La venta del CD con la banda sonora de la película fue tan bien, que sacaron un segundo volumen, que principalmente agrupaba las versiones de la canciones de la película y algún fragmento del score original.
También se puede conseguir la película en DVD y Blu Ray
Nicole Kidman, excelente actriz, de belleza incalculable y de carisma contagioso.
Todas sus actuaciones van más allá de lo puramente artístico para llegar a lo poético; es como si viviera con entusiasmo apasionado lo que interpreta. Desde que le vi por primera ves su imagen quedó esculpida en mi mente.
A raíz de la película la llamó Robbie Williams para grabar el dúo de “Something stupid”. Lástima que luego en su siguiente película musical “Nine” no funcionase y se apartase tanto del musical teatral.