SCARAMOUCHE
La compañía teatral catalana DAGOLL DAGOM creadora de musicales como “MAR Y CIELO“, “POE” o “ALOMA“, además de haber adaptado clásicos como “BOSCOS ENDINS” (Into the woods) o “EL MIKADO”, vuelve a apostar por otro musical completamente original en cuanto a propuesta, porque la historia está tomada de la famosa novela de capa y espada de Rafael Sabatini “Scaramouche” publicada en 1921 y ambientada en plena Revolución Francesa.
El texto ha conocido varias adaptaciones cinematográficas, una muda y otra más famosa dirigida por George Sidney y protagonizada por Stewart Granger en 1952, aunque también se adaptó al teatro musical en España con el titulo de “Scaramouche”, con música de Nacho Alonso y letras de Ignacio Alonso Delgado que protagonizaron Enrique Sequero y Angel Ruiz entre otros, que no consiguieron sacar partido de una propuesta muy endeble teatralmente y una partitura olvidable.
La adaptación de Dagoll Dagom es para un musical de gran formato en el que se ha reunido a colaboradores en otros proyectos de éxito como Albert Guinovart para la música y Joan Lluis Bozzo en el libreto, contando con la dirección musical de Joan Vives, las coreografías de Francesc Abós, el diseño escénico de Alfons Flores y el vestuario de Montse Amenós. Si bien la escenografía y el vestuario ya en la primera escena nos hacen ver un concienzudo número de arranque, la mezcla de parte de música grabada con música interpretada en directo por diez músicos, en un número coral con todo el reparto cantando, hacían que se perdiera gran parte del texto, lo cual para un número de inicio, en el que se nos tiene que meter en situación, no juega a su favor.
En el reparto están Toni Viñals (Scaramouche), Ana San Martín (Olympia), Ivan Labanda (Marqués de la Echalonne), Mireia Mambo (Camilla), Jordi Coromina (Bartolo), Clara Moraleda (Fanny), Albert Mora (Philippe), además de Frank Capdet, José María Hernández, Anna Alborch, Pep Ferrer, Eduard Mauri, Jan Forrellat, Lucía Torres, Cristina Murillo, Mireia Dol y Neus Pàmies, que fueren elegidos tras un casting de más de dos meses de pruebas.
Para ser justos hay que reconocer que todo el reparto está magnífico, aunque debo comentar que a la función que fui el personaje del marqués, en vez de representarlo Iván Labanda, lo defendió -el por otra parte estupendo- Frank Capdet, si bien para mi las que sobresalen por mérito propio son las tres féminas con mayor protagonismo Mireia Mambo, Ana San Martín y Clara Moraleda, cuyas canciones les permiten también lucirse más y mejor.
Ambientada en la Francia de 1789 con una clase dominante que castiga al pueblo, la necesidad de un cambio es vital y es cuando aparecen dos hermanos gemelos separados desde niños: René un caradura con talento que vive en una compañía de teatro de Comedia del Arte y Louis que fue adoptado por el Marqués de la Echalonne y es un intelectual que se encarga de la biblioteca de palacio. Mientras tanto Scaramouche, un héroe enmascarado, se ha convertido en el defensor del pueblo que escribe panfletos revolucionarios y se enfrenta a la aristocracia, convirtiéndose en la gran esperanza del pueblo.El guión es totalmente previsible y lleno de clichés, repetidos hasta la saciedad en títulos como “El hombre de la máscara de hierro”, “El tulipán negro” o “El prisionero de Zenda”, que restan interés al público que en ningún momento está preocupado por lo que les pasará a los personajes pues lo sabe de antemano y el giro final que no desvelaré para los que no la hayan visto, es más que lamentable, por no hablar de la última canción que parece que vaya a terminar con el “Tomorrow comes” de “Los Miserables”, aún así destaco que las canciones y los intérpretes son sin duda lo mejor de la obra.
El uso de efectos sonoros en golpes y caídas propios de película animada resultan postizos, ya que los actores no pueden seguir el ritmo endiablado e imposible de un dibujo animado, por otro lado las transiciones de un momento pretendidamente cómico con toda la compañía bailando o cantando en plan coral, para saltar a una escena dramática con un solo personaje cantando una balada lastimera, se repite en varias ocasiones y de forma bastante brusca.
La obra se estrenó el 23 de Septiembre de 2016 en el Teatre Victoria de Barcelona y pude verla poco después de forma que supongo que estarán puliendo cambios para darle un mayor brío y ritmo que haga que el público se quede atrapado por la historia de principio a fin. Estamos con un musical de Dagoll Dagom de muy buen acabado técnico, pero que dada su experiencia a lo largo de los años en el mundo del musical, nos permite exigirles más que a otros, que no cuentan con sus medios ni con un equipo tan bueno de profesionales.
MÚSICA: Albert Guinovart
LETRAS: Joan Lluís Bozzo
Existe el CD con el audio del musical y para los que no conozcan el guión pueden conseguir momentáneamente el DVD de la película de 1952, publicado en España.
Para terminar unos videos promocionales del musical
el making of del musical