
007: 1981 Sólo para sus ojos
Los últimos coletazos de las películas de la serie habían secado las mentes de los guionistas, incapaces de seguir por el camino de la espectacularidad y repetir una vez más la historia del millonario loco que pretende dominar el mundo, al que vencerá Bond en una pelea espectacular al final, ayudado con los inventos graciosos de Q, que siempre sacaban al agente de las situaciones más difícles en el último momento, además de que los admiradores de la serie habían manifestado su disgusto por el devenir del personaje tan lejos del creado por Ian Fleming, con lo que había que renovarse o … morir.
Por otro lado, para complicarlo un poco más, a pesar del éxito en taquilla de las películas, en las que cada título superaba la recaudación del anterior, las críticas, las quejas de los fans y los años que seguía cumpliendo Roger Moore que rebasaba los 53, complicó la historia al manifestar el actor que no quería seguir interpretando el personaje y todavía se agravó el tema con la súbita muerte de Bernard Lee, lo cual retrasó el rodaje hasta que Broccoli consiguió convencer a Moore de continuar y en un giro del guión como homenaje a Lee, en esta película por primera vez no aparecía el personaje de M.La historia buscaba ser más creíble y aunque se tomaron dos relatos cortos de Ian Fleming “For your eyes only” y “Risico”, en los que en uno Gonzales, asesino cubano mataba a la familia Havelock para hacerse con su hacienda y su hija Judy jura matarlo cruzándose en su camino con James Bond, en el otro relato 007 era enviado para terminar con unos contrabandistas que introducían heroina en Inglaterra, contactando con Kristatos que aunque Bond no lo sabía trabajaba para el servicio secreto ruso, por tanto en la película hay ideas tomadas de ambos relatos pero la acción se desata al explosionar una mina marina en un pesquero griego que alberga de incógnito una base inglesa desde la que se controlan los submarinos Polaris mediante una máquina ATTAC, desencadenando una búsqueda de los restos del naufragio para hacerse con la máquina cuanto antes y evitar que caiga en manos de potencias enemigas.
Por primera vez en los títulos de crédito de la película se acreditaba a Ian Fleming como autor del personaje de James Bond, pero no del argumento que lo firmaron Richard Maibaum y Michael G. Wilson, buscando retomar el estilo de las películas que fueron más fieles a las tramas creadas por Fleming como “Desde Rusia con amor” o “Al Servicio Secreto de Su Majestad“, aunque esta última no tuviera el éxito deseado, pero se privó a Bond de los habituales gadgets y la película perdía en espectacularidad para ganar en una historia más terrenal y creíble.La escena inicial ya era toda una declaración de intenciones mostrando a Bond en un cementerio, al que habia ido para llevar flores a su esposa Theresa Bond, en cuya lápida leemos “Tenemos todo el tiempo del mundo”, título de la canción que cantaba Louis Armstrong en la película “Al Servicio Secreto de Su Majestad”, para de ahí pasar a la escena previa a los créditos de la película que no es más que una trampa de su acérrimo enemigo Blofeld, de nuevo acariciando su gatito blanco, al que aparentemente liquidaba de una vez por todas, era como acabar con una etapa, rindiendo a su vez homenaje a la misma.
Las localizaciones de países exóticos en este caso incluyó Corfú, las costas griegas, las caprichosas formas de las montañas de Meteora con el monasterio de St. Cirilo, la estación de esquí de Cortina D’Ampezzo (Italia), aunque algunas escenas que simulaban encontrarse en la sierra madrileña, cargadas de todos los tópicos imaginables, debieron rodarse en Italia o Grecia y las escenas submarinas que simulaban ser el mar Jónico, eran rodadas en las transparentes aguas de las Bahamas y por primera vez Ken Adam no se encargó de los decorados.Con respecto a la música al no poder contar con John Barry, éste propuso a Bill Conti, famoso compositor nominado al Oscar por su canción “Gonna fly now” para la película “Rocky” (1976) y que escribió la canción que daba título al film, con letras de Michael Leeson, que también sería nominada al Oscar a la mejor canción y se colocó en el puesto número 4 de las listas de éxitos. La belleza de la cantante del tema Sheena Easton dejó tan impactado a Maurice Binder, creador de los títulos de crédito de casi todas las películas de la serie, que decidió que apareciese físicamente cantando el tema, algo que no se había hecho nunca, lo cual obligó a reescribir varias veces el tema para ajustarlo a los títulos de crédito de la película.
El resto de la partitura de Conti tiene momentos poco acertados como meter un tema discotequero “Make it last all night” o el abuso de sintetizadores con el tema de 007 en momentos de persecuciones, como ya hiciera más acertadamente Marvin Hamlisch en “La espía que me amó“. Conti utiliza las localizaciones para inspirarse así incluye aires griegos o pretendidamente hispanos en las escenas de la huida con el Citroen 2CV amarillo en “A drive in the country” o “Gonzales takes a drive”, aparte de otros temas más inspirados como “Submarine”, “St. Cyril’s Monastery”, “Take me home” o el titulado “Cortina” que recuerda a Henry Mancini y que en conjunto acompaña bien a las imágenes aunque no aporta nada nuevo a la serie.En el reparto estuvo como la vengadora Melina Havelock (Carole Bouqet), muy guapa, pretendidamente peligrosa con su ballesta, aunque actoralmente inexpresiva, acompañada de un carismático Columbo (Topol), el enigmático Kristatos (Julian Glover), la elegante Condesa Lisl Von Schlam (Cassandra Harris que curiosamente era la esposa de Pierce Brosnan, que fallecería en 1991 sin llegar a ver a su marido interpretando al famoso agente secreto), la protegida de Kristatos Bibi (Lynn-Holly Johnson) y en un papel secundario y minúsculo Charles Dance, además de los habituales Desmond Llewelyn (Q) y Lois Maxwell (Moneypenny).
Esta fue la primera película en la que John Glen que había sido montador y director de la segunda unidad de muchas de las películas de 007, asumió la dirección convirtiéndose con el tiempo en el que dirigiría mayor número de películas de 007, ya que a esta seguirían Octopussy (1983), A View to a Kill (1985), The Living Daylights (1987) y Licence to Kill (1989).

Carole Bouquet, Roger Moore y Julian Glover
El final de la película tiene una escena graciosa en la que aparece Margaret Thatcher en la cocina con su marido hablando con 007, seguida de una frase lapidaria cuando Melina se quita el albornoz que cubre su desnudez y le dice a Bond: “Sólo para tus ojos, querido”.
Como curiosidad añadimos en los videos la canción rechazada que compusieron Deborah Harry con Chris Stein, interpretada por Blondie, de la que algún fan ha hecho un montaje mezclando los créditos de “Solo para sus ojos” y “Licencia para matar”, jugando con la idea de que Timothy Dalton ya hubiese interpretado a James Bond, papel que se le ofreció en repetidas ocasiones hasta que finalmente aceptó en 1986.
MÚSICA: Bill Conti
LETRAS: Michael Leeson
DURACIÓN: 127 minutos
Existe el CD expandido con la banda sonora de la película y el video en formato doméstico, tanto DVD como Blu-Ray
Para terminar algunos videos, empezando por el trailer oficial de la película
Los títulos de crédito de la película con Sheena Easton cantando el tema
escenas suprimidas del montaje final comentadas por el director John Glen
la canción compuesta y cantada por Blondie que fue rechazada
otra canción rechazada que cantó Elisabeth Andreassen titulada Karleksmagi
la escena de la persecución en el Citroen en los supuestos alrededores de Madrid
La canción cantada nada menos que por Melanie C, la que fuera una Spice Girl