SPEED-THE-PLOW
Adaptada por Jaime Pujol y Diego Braguinsky se ha estrenado en Valencia la obra teatral de David Mamet “Speed-the-plow” con el título de “A x todas“. Estrenada originalmente en 1988 donde hacía un ataque feroz -como suele ser habitual en el autor- del entramado de producción en el mundo del cine americano.
David Mamet escribe para el teatro en su personal estilo donde lo fundamental es la palabra. Escribe para espacios con el mínimo cambio posible de decorados, de forma que sus obras sean fáciles de montar e incluso de llevar de gira, porque todo el énfasis está en el texto, con unos diálogos vertiginosos, cortantes en los que los intérpretes no respetan sus turnos para hablar y se atropellan en sus conversaciones en las que se solapan sus diálogos.
Su trabajo más conocido en teatro es “Glegarry Glen Ross” (1984), por la que ganó el Premio Pulitzer. En España hemos podido ver otras obras suyas como “El matrimonio de Boston” (Boston marriage, 1999), “Noviembre” (November, 2007) y “Razas” (Races, 2009). También ha tenido éxito escribiendo o adaptando guiones para el cine como “El cartero siempre llama dos veces” (Postman always ring twice, 1981), “Los intocables” (The untouchables, 1987), o “Veredicto final” (The veredict, 1982), además de dirigir algunas películas con guiones originales suyos como “Casa de juegos” (House of games, 1987), “Homicidio” (Homicide,1991) o “State and Main” (2000), entre otros.
En “Speed-the-plow”, se centra en el mundo del cine y en la adaptación que han hecho de ella Jaime Pujol y Diego Braguinsky utilizan un fundido en negro y unas molestas luces discontinuas que quieren simular una proyección de cine, para poder cambiar el mínimo decorado y ofrecer los tres actos del tirón. Aún así la obra roza la hora y media de duración.
También se ha cambiado de nombre de los personajes para “españolizarlos” de forma que Bobby Gould, el recién nombrado director de producción de una compañía cinematográfica, aquí se llama Manuel Barrios, Charlie Fox que en el pasado fuera su jefe y ha terminado siendo su socio aquí es Lobo y por último la secretaria provisional Karen aquí se llama Clara.
Mamet juega hábilmente con estos tres personajes mostrando sus ambiciones, luchas, celos, ansia de poder, desprecio por la calidad del producto y pasión por el dinero. Ellos dos son despiadados en el negocio y la aparente cordialidad, amistad y buen rollete se adivina falso y que solo estarán juntos mientras cada uno pueda usar al otro en su propio beneficio. La secretaria –eventual- que aparentemente es el personaje más “normal” e “ingénuo” que con sus frases directas descoloca a la pareja, llegado el momento también se deja atrapar por la vorágine de conseguir sus propósitos a cualquier precio.
La selección musical incluyendo los temas “Don’t bring me down” o “What a wonderful world”, en uno de los fundidos en negro y al final de la obra, perfectamente integrados con la historia que se está contando y con un doble sentido claro, al estar cantados en inglés no creo que la mayoría de público viera la relación, ya que no se suele atender a la letra y quizá en este caso, sí hubiera sido de agradecer buscar unos temas con similar propósito, pero cantados en español, para ayudar al público a establecer la conexión con el texto de la obra.
“Speed-the-plow” se estrenó originalmente el 3 de Mayo de 1988 en el Lincoln Center de New York teniendo en el reparto a Joe Mantegna, actor habitual en los trabajos de Mamet, Ron Silver como Fox y Madonna como Karen. Fue nominada a tres premios Tony y ganó el correspondiente a mejor actor Ron Silver. La obra se ha repuesto en diferentes ocasiones en Broadway, siendo la primera de ellas en el 2008, donde también tuvo un reparto de campanillas Jeremy Piven, en el papel del director de producción, que al enfermar fue sustituido por Norbert Leo Butz y más tarde por William H. Macy. Raul Esparza interpretaba a Fox, papel por el que fue nominado al Tony y Elisabeth Moss fue Karen.
Habría que esperar hasta el 2008 para que se estrenase en Londres. Se hizo en el Old Vic, del que era director artístico en aquel momento el actor Kevin Spacey, también asiduo en obras de Mamet, que en esta ocasión se reservó el papel de Fox, acompañado por Jeff Goldblum y Laura Michelle Kelly, un reparto más que interesante.
AUTOR: David Mamet