
WEST SIDE STORY, Madrid 2018
Vuelve a los escenarios españoles “WEST SIDE STORY” el musical que impactó a toda una generación con unas coreografías de Jerome Robbins impresionantes, que además fue el artífice de la idea de trasladar a los Capuletos y Montescos a New York, pero con unos enfrentamientos puestos al día por la rivalidad entre los americanos y los hispanos luchando por un mismo espacio, todo ello expresado por las excelentes letras de Stephen Sondheim, en las canciones que hacían brillar más si cabe la música de Leonard Bernstein.
Esta nueva versión que nos trae SOM PRODUCE cuenta con la dirección del coreógrafo y director Federico Barrios, además de la adaptación del libreto y canciones de David Serrano. El reparto está formado por Javier Ariano (Tony), Talía del Val (María), Ana San Martin (alternante de María), Silvia Álvarez (Anita), Víctor González (Riff), Oriol Anglada (Bernardo), Armando Pita (Schrank), Enrique del Portal (Doc), Diego Molero (Glad Hand) y Carlos Seguí (Krupke).
Además del grupo de los Jets formado por Javier Santos, Miguel Ángel Collado, Ernesto Pigueiras, Axel Amores y Nil Carbonell con sus chicas Ana Escrivá, Kristina Alonso, Julia Pérez, Beatriz Mur y Joana Quesada. En el grupo de los Sharks están Jan Forrellat, Fran Moreno, Daniel Cobacho, José Antonio Torres, Miguel Ángel Belloto y Adrián García y sus chicas Luciana de Nicola, Lucía Ambrosini, Teresa Abarca, Ana Acosta y Belinda Henriquez. El reparto lo completan los swings Briel González, Pablo Badillo, Angie Alcázar, Zoe Buccolini y Tamara Suárez.
West Side Story es un clásico por derecho propio, con una partitura, unas letras y unos bailes impresionantes, que como hemos dicho impactaron al público de finales de los años cincuenta en todo el mundo. La película estrenada en 1961, manteniendo los mismos números musicales, mejoraba el original teatral al cambiar números del segundo al primer acto como “I feel pretty” cuyo tono simpático es más apropiado antes de que estalle la tragedia, o desplazando “Cool” al segundo acto para explotar con mayor fuerza la rabia y tensión en el grupo tras la pelea. Otros aciertos del film fueron mantener a los chicos en el número de “América”, consiguiendo una mayor vistosidad y fuerza. además de suprimir el ballet de “Somewhere” que rompe el ritmo de la narración.
La versión que vemos en Madrid es la original teatral, que es la autorizada para representarse de esta forma, quiero decir que los cambios que notará el público que haya visto la película, no han sido ideas del equipo español, sino que cuando se compran los derechos, están obligados a respetar la estructura que se les marque. Dicho esto, quiero reconocer la excelente labor de la orquesta, así como el alto nivel de las coreografías y la trabajada adaptación de las letras y más cuando estamos hablando de algo creado por tres genios como fueron Bernstein, Robbins y Sondheim.
En la función a la que asistí Tony fue Jan Forrellat al que conocía de otros musicales como “Per sobre de totes les coses”, “Cinc” o “Scaramouche” y que encontré actoralmente frío en “Maria” o “Something’s coming”. María fue Ana San Martin que también viene de protagonizar otros musicales como “Mar i cel” o “Scaramouche” y que me pareció excesivamente lírica. Digo esto porque son dos actores que no por ser covers tienen poca experiencia y me parece que quizá con algunos apuntes desde la dirección mejorarían mucho el resultado final. La mejor del reparto que yo vi fue Silvia Álvarez componiendo una Anita perfecta en cada matiz del personaje, brillando como actriz, cantante y bailarina.
Habría que trabajar más la interpretación de los pandilleros Jets y Sharks, que si bien cumplen en los bailes, se quedan cortos en los textos hablados que necesitan de voces y actitudes más agresivas que las que llegan al patio de butacas. Armando Pita y Enrique del Portal, interpretan al policía racista Schrank y a Doc, el conciliador dueño del bar, en los que ambos cantantes pueden lucirse como actores, ya que a pesar de ser los dos miembros del reparto con mayor experiencia dentro del musical en nuestro país, sus personajes en esta ocasión, no tienen ninguna canción asignada.
Siempre es una buena ocasión para disfrutar de un buen musical con la música en directo y hay que agradecer que se traigan musicales clásicos a nuestros teatros, más allá de los mega éxitos de Broadway o Londres. Ahora solo nos queda esperar que se estrene la película, para comprobar hasta qué punto han permitido a Steven Spielberg dar su visión sobre este musical.
MÚSICA: Leonard Bernstein
LETRAS: Stephen Sondheim
ADAPTACIÓN: David Serrano
No existe grabación de esta producción. En el teatro se vende el CD con la versión de la película
Terminamos con un video promocional
y una grabación del “Tonight” con Talia del Val y Javier Ariano
1 octubre, 2018 a las 4:59 pm
Buenas tardes, ayer fui a ver el musical y creo que lo mejor es la música en directo y algunos de los bailes. Pero la adaptación del original es mala. La versión original ensalzaba el romanticismo y los problemas sociales. En cambio, en esta versión se abusa de diálogos y escenas subidas de tono e incluso violentas que le dan al espectáculo un toque basto y grosero que se aleja de la historia original. Es una pena que no se haya sabido hacer del musical una obra de arte pues se ha quedado en una burda imitación de poca calidad.
Vaya. No la he visto aún. Lo de violencia ya estaba en el original y no sólo en las peleas de jets y sharks sino en el ambiente general por defender cada banda su “territorio” y me llama la atención lo que dices de la adaptación pues David Serrano hasta ahora no me ha decepcionado nunca, pero me esperaré a verla para juzgar.
Gracias por compartir tu experiencia.
La violencia siempre ha formado parte de una historia ambientada en el mundo de las pandillas juveniles. Me sorprende que alguien esperase ver otra cosa. ¿Habrá visto la película recientemente por la recuerda a su manera? Los tacos no podían formar parte de los diálogos en una película rodada en 1962 y menos aún en el doblaje español, pero no cabe esperar a estás alturas que adolescentes conflictivos de barrios marginales se expresen de otra manera.
Completamente de acuerdo contigo.